El jefe de MI5, Ken McCallum, ha emitido una advertencia contundente de que las agencias de inteligencia rusas están en una misión sostenida para crear caos en las calles británicas. Esto forma parte de una estrategia más amplia de Vladimir Putin para debilitar la determinación occidental, especialmente en respuesta al apoyo del Reino Unido a Ucrania. McCallum también destacó la creciente complejidad de las amenazas que enfrenta el Reino Unido, incluidos los planes de terror y los intentos de sabotaje. El Reino Unido se enfrenta a un nivel sin precedentes de amenazas interconectadas, con Rusia e Irán siendo actores clave en estos esfuerzos desestabilizadores.
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